6 aspectos a tener en cuenta antes de comprar una cámara termográfica

Comprar una cámara termográfica se trata siempre de una inversión a largo plazo. Aunque, en un principio, nos pueda parecer que el precio es uno de los elementos principales a tener en cuenta a la hora de elegir, hay que tener presentes otros aspectos cuando vayamos a tomar la decisión final. Sea cual sea la cámara que necesites para tu trabajo, es evidente que esta debería disponer de la mejor calidad y fiabilidad además de un servicio y una asistencia técnica de la máxima calidad.

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Actualmente cuando queremos comprar una cámara termográfica nos encontramos que existen una gran variedad de tipos. Estos pueden ir desde modelos de mano muy asequibles que sirven, por ejemplo, para analizar el sistema de climatización de una vivienda, hasta cámaras altamente especializadas con resolución HD para investigaciones científicas. 

Está claro que existen muchos factores que se deben tener en cuenta a la hora de comprar una cámara termográfica. A continuación, te presentamos 6 puntos a tener en cuenta que de bien seguro te ayudarán a tomar una decisión fundamentada a la hora de adquirir esta tecnología. 

1. Comprar una cámara termográfica que disponga de la mayor resolución posible

La mayoría de las cámaras termográficas tienen una resolución menor que las de luz visible, por lo que es necesario prestar especial atención a la resolución del dispositivo. Las cámaras con mayor resolución pueden medir la temperatura de objetos más pequeños a una mayor distancia y, a su vez, ofrecer resultados más nítidos. Esto hace que las mediciones obtenidas sean más precisas y fiables.

También hay que tener en cuenta la diferencia entre la resolución del detector y la de la pantalla que incorpora la cámara. Algunos fabricantes presumen de pantallas LCD de alta resolución y esconden la baja resolución del detector, cuando esta última es, sin duda, la más importante. 

A la hora de comprar una cámara termográfica es importante contar siempre con un buen asesoramiento técnico de un experto en termografía para que te ayude a escoger el modelo que mejor se adapte a tus necesidades.

Conoce más sobre la resolución de las cámaras termográficas en este post: 

“LA IMPORTANCIA DE LA RESOLUCIÓN EN LAS CÁMARAS TÉRMICAS”

2. Selecciona una cámara térmica que te ofrezca unos resultados precisos y fiables

Las cámaras termográficas no solo muestran las diferencias de calor, sino que permiten medirlas, con lo cual la precisión y uniformidad de las mediciones es un factor muy importante a la hora de determinar el valor de una cámara térmica.

Para obtener unos resultados óptimos, busca un dispositivo de termografía con una precisión igual o superior a ± 2% (o 3,6ºF), además de asegurarte que cuenta con herramientas internas que te permitan introducir los valores de emisividad y temperatura reflejada. También es importante contar con instrumentos como los puntos móviles y los cuadros de área para aislar y anotar las mediciones de temperatura que se puedan guardar como datos radiométricos e incorporarse en los informes de hallazgos.

Todos estos aspectos pueden no parecer relevantes en una etapa inicial, pero a medida que adquieras más experiencia con la cámara termográfica, estas funciones serán de mucha utilidad. 

Conoce más sobre la emisividad de las cámaras termográficas en este post: 

“¿CÓMO AFECTA LA EMISIVIDAD A LAS IMÁGENES TERMOGRÁFICAS?”

3. Comprar una cámara termográfica que sea cómoda para realizar tu trabajo

Aspectos como el peso de la cámara, su ergonomía o la movilidad de la lente serán relevantes en jornadas cargadas de inspecciones. Además, si la cámara cuenta con botones adicionales sencillos colocados de forma intuitiva pueden facilitarte las tareas, en comparación con un sistema que requiera utilizar un solo botón para recorrer todas las opciones del menú. 

En el caso de los modelos de mano, antes de comprar una cámara termográfica asegúrate que también está equipada con, al menos, dos baterías que se puedan cambiar con facilidad y rapidez sobre el terreno para que no veas interrumpida la jornada y así trabajar de forma eficiente.  

4. Consigue un software adecuado y compatible con los dispositivos con los que ya está trabajando

La creación de informes es una función indispensable para documentar e informar de los datos obtenidos y así mejorar la eficiencia de nuestro trabajo. En la actualidad, cuando queremos comprar una cámara termográfica la mayoría ya incluyen un software gratuito que permite realizar análisis de imágenes básicos y crear informes sencillos. Por otro lado, también existe software avanzado con capacidad para realizar análisis más exhaustivos y crear informes más personalizados, lo cual permite sacar el máximo provecho a las características y funciones de la cámara. 

En este punto es importante tener en cuenta que, si contamos con un proveedor que ofrezca unos servicios completos a la hora de comprar una cámara termográfica, también nos podrá ofrecer un paquete de software diseñado a medida para finalidades específicas y que se adecúe perfectamente al desarrollo de nuestro trabajo.

5. Asegúrate de disponer de un servicio postventa cercano y de calidad

En numerosas ocasiones hemos sido testigos de empresas que deciden comprar una cámara termográfica sin nada más a través de tiendas online y de plataformas no especializadas y, en el momento que han tenido alguna otra necesidad no se les ha brindado ningún soporte. Esto puede llegar a afectarles muy negativamente hasta el punto de hacer que una inversión importante como es la de comprar una cámara termográfica pierda todo su sentido.

Hay que asegurarse que en el momento de comprar una cámara termográfica se dispondrá de un servicio postventa y de atención al cliente cercanos para que puedan dar un buen soporte cuando sea necesario. De ese modo, en caso de necesitar un servicio de mantenimiento, reparación, o simplemente para resolver algunas dudas técnicas y de funcionamiento que puedan surgir, siempre contarás con alguien de confianza a tu lado. Asegúrate siempre de comprar una cámara termográfica a través de empresas especializadas y verás cómo tu inversión tendrá la rentabilidad que esperas.

6. Invierte en formación para complementar la compra de una cámara termográfica

El mundo de la termografía no se limita únicamente a saber cómo se utiliza una cámara térmica. Cuando tengas que comprar una cámara termográfica, asegúrate de seleccionar un proveedor que también pueda ofrecerte una formación específica. En el caso de la termografía asegúrate de recibir una formación específica impartida por un organismo oficial como el Infrared Training Center (ITC), el centro de formación en infrarrojos más importante del mundo.

Invertir en formación no solo te permitirá sacar el máximo provecho a la inversión, sino que, además, te facultará para subir de peldaño en tu carrera y conseguir que tu empresa aumente de valor con una certificación acreditada.

Si tienes presentes todas estas recomendaciones cuando tengas que comprar una cámara termográfica estamos seguros que no solo acertarás en la adquisición con un dispositivo que se adapte a la perfección a tus necesidades. También te asegurarás de obtener un proveedor de confianza a tu lado que te ayudará y asesorará en lo que necesites en todo momento.