Realizar un correcto mantenimiento de la maquinaria industrial es clave para luego no encontrarnos con contratiempos que nos obliguen a parar la producción de manera imprevista.
Hoy en día, podemos clasificar el mantenimiento industrial en 3 clases diferentes: el mantenimiento correctivo, que se centra en sustituir las piezas o partes de la maquinaria cuando están rotas o desgastadas; el mantenimiento preventivo, basado en programar acciones para minimizar los posibles fallos; y el mantenimiento predictivo, donde los profesionales son capaces de prever cuándo pueden surgir los problemas y programan las acciones pertinentes para que estos no lleguen a ocurrir.
Estos diferentes tipos de mantenimiento no son excluyentes entre sí y se pueden complementar a la hora de organizar un plan de mantenimiento industrial, pero si queremos tener unas máquinas optimizadas deberemos de potenciar siempre las acciones de mantenimiento predictivo, ya que ofrece múltiples ventajas respecto a las otras 2 clases.
Las principales ventajas del mantenimiento predictivo
Como ya hemos mencionado, el mantenimiento predictivo se utiliza para realizar un diagnóstico de la maquinaria y, gracias a los datos recogidos, podemos calcular en qué momento será necesario tomar las medidas oportunas para realizar una intervención antes de que ocurra algún fallo grave. Por lo tanto, podemos decir que el mantenimiento predictivo monitoriza las condiciones mecánicas de las máquinas para conseguir sacarles el máximo rendimiento y, a su vez, permite realizar las reparaciones a tiempo para evitar roturas o fallos durante su funcionamiento. Sus principales ventajas se pueden resumir en 4 puntos que vamos a ver a continuación:
1. Ahorro en los costes de mantenimiento
Si somos capaces de obtener datos objetivos del funcionamiento de nuestras máquinas seremos conscientes de cuándo serán necesarias las intervenciones de mantenimiento. De ese modo evitaremos tener que llevar a cabo acciones de forma prematura – como, por ejemplo, cambiando piezas que aún pueden tener una vida útil -, o cuando ya es demasiado tarde, viéndonos obligados a realizar intervenciones de mantenimiento de tipo correctivo, cuando la máquina ya ha dejado de funcionar por un fallo grave.
Si podemos optimizar las piezas de nuestras máquinas y realizar una previsión de las acciones que se tienen que llevar a cabo, con un mantenimiento predictivo bien definido podríamos conseguir hasta una reducción del 10% de los costes directos de mantenimiento, y de hasta un 50% en costes asociados (recambios, herramientas y materiales necesarios para las intervenciones, horas de trabajo del operario, etcétera).
2. Disminución de los tiempos de parada y de reparación de las máquinas
Cuando incorporamos acciones de mantenimiento predictivo en nuestra empresa lo primero que veremos es como automáticamente se crea un calendario con las acciones que deberemos llevar a cabo en un futuro. Esto nos permitirá planificar las acciones con tiempo y tener una previsión de qué personal, herramientas y materiales necesitaremos para llevarlas a cabo. Gracias a esta previsión seremos capaces de reducir los tiempos de parada de las máquinas y, a su vez, la duración de las reparaciones. Así eliminaremos los imprevistos y optimizaremos el trabajo de los operarios responsables del mantenimiento industrial.
3. Optimización de los stocks de piezas necesarias para el repuesto
Si somos capaces de definir una buena previsión de las intervenciones que tendremos que llevar a cabo también podremos planificar qué piezas o materiales de repuesto necesitaremos en cada momento. Gracias a trabajar con el mantenimiento predictivo nos aseguraremos de tener el stock suficiente para las intervenciones a corto plazo y dispondremos del tiempo suficiente para realizar los pedidos para las piezas de repuesto que vamos a necesitar en un futuro. De ese modo no solo eliminamos los costes de la compra de materiales que aún no van a sernos necesarios, sino que también supone un ahorro de espacio de almacenaje de stock en nuestras instalaciones.
4. Mejora de la producción y de la vida útil de las máquinas
En el momento que incorporamos el mantenimiento predictivo en el día a día de nuestra empresa vamos a ver cómo mejorará nuestra producción y, a su vez, la vida útil de nuestra maquinaria. Esto se debe a varios motivos. Por una parte, con las acciones de mantenimiento predictivo se reducirán los tiempos de parada de las máquinas para su mantenimiento y, al ser más conscientes de en qué momento serán necesarias las intervenciones, también podremos optimizar su rendimiento y mejorar la productividad.
Por otro lado, al poder prever cuándo deberemos realizar las acciones de mantenimiento nos anticiparemos al final de la vida útil de las piezas y así evitaremos fallos graves que puedan suponer un gran desgaste o la rotura de la máquina. Si nos anticipamos a los daños graves que pueda sufrir la maquinaria industrial alargaremos su vida útil.
El uso de la cámara termográfica en el mantenimiento predictivo
Una de las herramientas más útiles con las que llevar a cabo el mantenimiento predictivo son las cámaras termográficas. Estos equipos utilizan las imágenes infrarrojas para monitorizar la evolución de las temperaturas de las máquinas industriales y de sus componentes. En el caso de detectar variaciones anómalas o un calor excesivo en alguna parte de la maquinaria puede significar que en ese punto hay un problema que llevará a un fallo grave de la máquina y que se requiere de una intervención.
Las cámaras termográficas son de fácil uso y permiten revisar las máquinas que analizamos sin necesidad de paradas de producción o, ni tan siquiera, contacto directo con ellas. Los técnicos de mantenimiento pueden tomar lecturas a distancia para luego analizarlas y así poder hacer una previsión de cuando van a ser necesarias las intervenciones.
Si quieres más información sobre las ventajas del uso de una cámara termográfica para el mantenimiento predictivo contacta con uno de nuestros técnicos asesores y estaremos encantados de resolver todas tus dudas.
