Cámara termográfica compacta FLIR C5: La herramienta contra la perdida de calor para hogares energéticamente eficientes
Desafío
La Greening Campaign, fundada por Terena Plowright, se ha fijado un ambicioso objetivo: conseguir que todo el Reino Unido sea más ecológico, comunidad por comunidad. Esta iniciativa pretende abordar un problema acuciante: la falta generalizada de concienciación sobre la importancia de la eficiencia energética en los hogares.
Según Citizen’s Advice, un hogar medio del Reino Unido pierde aproximadamente 350 libras al año debido a un aislamiento deficiente. Esta pérdida asciende a 951 libras anuales en el caso de las viviendas menos eficientes. Estas cifras ponen de manifiesto el importante impacto financiero de la ineficiencia energética en los propietarios de viviendas de todo el país.
La situación se complica aún más por el hecho de que muchas de las zonas críticas donde se produce la pérdida de calor son invisibles a simple vista. Este reto exige el uso de equipos especializados capaces de detectar y solucionar estas fugas de energía tan escurridizas. Dado que la Campaña Ecológica funciona principalmente gracias al esfuerzo de voluntarios, la herramienta no solo tiene que ser eficaz, sino también fácil de usar.
Solución
Reconociendo la necesidad de una herramienta accesible para identificar y demostrar la ineficiencia energética, la campaña ecológica seleccionó la cámara térmica compacta FLIR C5 por su diseño fácil de usar. Terena explicó: «Cuando estudiamos la cámara, pensamos: ‘¿Qué es lo que la gente usaría con confianza? Elegimos la FLIR C5 porque se parece a un teléfono móvil».
Colin, voluntario de la Campaña Ecológica y topógrafo, compartió su entusiasmo por el potencial de la termografía para revelar numerosas soluciones a los problemas de pérdida de energía: ”Fue fascinante escuchar cuántas respuestas hay a los problemas que tiene la gente de pérdida de energía a través de la pérdida de calor. A mí, personalmente, como topógrafo, me fascinaba ver qué resultados obtendríamos utilizando una cámara termográfica”.
Las cámaras FLIR C5 se distribuyeron entre los miembros de la comunidad, permitiéndoles detectar visualmente por dónde se escapaba el calor de sus casas, haciendo así visible lo invisible.
Colin da detalles sobre su primera salida y la de los voluntarios con las cámaras térmicas: ”Fuimos a las primeras, como aficionados. Estuvimos jugando con las cámaras, tardamos media hora en entenderlas».
Resultados
Los voluntarios equipados con cámaras térmicas han podido demostrar a los propietarios las ventajas tangibles de la eficiencia energética de una forma visualmente impactante. Terena comparte el efecto positivo de facilitar a la gente la comprensión y el tratamiento de los problemas de pérdida de calor: Cuando le hablas a la gente de la pérdida de energía, es muy difícil conseguir que la vean realmente, pero cuando la tienes en tecnicolor, justo delante de ellos, entienden realmente dónde está esa pérdida de calor».
«Y eso es lo bueno de estas cámaras: se puede ver hasta el más mínimo hueco en el aislamiento del tejado».
Kirsty, miembro de la comunidad, explica su experiencia con la iniciativa: «Todo el mundo fue muy amable; miramos juntos todas las ventanas y puertas, señalamos zonas en las que quizá no me había fijado; fue muy beneficioso. Definitivamente me preocupa reducir mi huella de carbono». También destaca algunas respuestas sencillas a la pérdida de calor: «Pequeñas cosas como los protectores contra corrientes de aire -todo el mundo puede usarlos-, cerrar las cortinas pronto, mantener todo el calor dentro… y no tiene por qué costar mucho».
Además, la campaña ha creado un efecto dominó: más de 200 comunidades están ahora preparadas para transmitir sus conocimientos y experiencias a otras. Este movimiento de base, impulsado por la dedicación de voluntarios y el uso innovador de las cámaras térmicas de FLIR, está creando un mosaico de comunidades energéticamente eficientes. Como dijo Colin: «Lo que cada uno de nosotros puede hacer: somos una gota en el océano, pero, en realidad, todos juntos somos ese océano; podemos hacer esos cambios».
El éxito de la Campaña Ecológica subraya el poder del compromiso comunitario, la tecnología accesible y la educación práctica para impulsar un cambio medioambiental significativo. Es un modelo convincente de cómo las acciones locales pueden contribuir a soluciones globales, comunidad por comunidad.